sábado, 20 de julio de 2013

NO NECESITO MÁS






Cuando llegan las vacaciones hay veces que si no te vas de viaje y por supuesto a sitios a cada cual más exótico, eso de ir al pueblo o a preciosos parajes españoles que desconocemos, como que parece muy vulgar.

Una de mis pasiones es viajar y conocer sitios, costumbres, patear los sitios a los que voy, de todas partes, cuando puedo de otras culturas.

Por distintas circunstancias familiares llevo dos veranos que no puedo programar con tiempo y por tanto buscar ofertas asequibles a mi maltrecha economía en progreso continuo y debido a mis vacaciones, siempre en temporada alta, no facilita una escapada, porque desde luego o yo sé mirar muy mal por aquí o no encuentro las estupendísimas ofertas que me cuentan algunas personas.

Veranear o descansar en Madrid, como en todas partes, tiene sus muchas ventajas, claro está si se quiere encontrarlas.

El concepto vacaciones para mí está cambiando, de acuerdo que a la fuerza, pero simplemente un libro a la sombra unos chapuzones en una piscina y escuchando sólo el silencio es una experiencia en la que he encontrado serenidad, tranquilidad y mucho descanso que falta me hacía. 
Cuando tengo ganas y no hace mucho calor, un paseo en bici.

A los hiperactivos, nos cuesta relajarnos y sobre todo mentalmente, siempre tenemos la cabeza llena de datos y procesando, eso sí, cuando encontramos la fórmula de relax, tampoco queremos dejarla.

Los libros, durante toda la vida, han logrado muchos efectos beneficiosos, desde aprender a trasportarme a otros mundos, los vivo tanto que cada vez me gusta que sean más grandes y que no terminen nunca…sobre todo algunos. Con ellos también me emociono, me rio, en algunos no me gusta el final, y leo mucho escritor español porque me gusta lo cotidiano de la época y mundo que conozco más, me fascina la novela histórica.

Me dejo recomendar por buenos amigos e incluso buenos escritores, pero tengo mis propios gustos y libros que tengo que esperar a leer en su momento, no siempre puedo centrarme en profundidades y menos ahora. 

Es curioso, creo que todo lo que se escribe y que escriben muchos autores debiera ser leído, claro que no da tiempo a tanto, cierto es que algunos a los 10 minutos…se cierra y no se vuelve a abrir.

Me han pasado miles de libros para la tablet  y aún no he leído ninguno, me gusta sentir el libro en las manos, pasar páginas, poner un marcapáginas cuando tengo que dejarlo y que no se manche ni estropee.

Me gusta regalar libros y que me regalen libros y compro muchos, eso sí edición bolsillo, por tanto los de actualidad tardo unos meses, pero voy haciendo una lista de los que me interesan y cuando ya están más baratos, a por ellos.

Los de la profesión o temas relacionados con la infancia y juventud…. como por internet, hay muchas cosas inservibles, desactualizadas y lo que es peor que confunden cuando no se sabe del tema. 

Igual que los contenidos por la red, sus creadores debieran cerrar webs y blogs que no actualizan, con los libros incluso recientes debieran haber comisiones científicas para desacatalogarlos y no digamos de algunos folletos divulgativos…

Recientemente he hecho un curso online y “gratuito” (lo pagamos indirectamente), avalado por dos buenas organizaciones y con un libro de consulta, con créditos por supuesto, aunque a mi poco me interesan ya y si lo que interesa es esto último comprar créditos, pues vale, pero es lamentable que se editen ciertas cosas. En el lugar adecuado escribiré sobre ello.

Y retomo el título de este post, no necesito nada más que lo ya dicho y a ti.

Proverbio hindú
Un libro abierto es un cerebro que habla; cerrado un amigo que espera; olvidado, un alma que perdona; destruido, un corazón que llora.

 Proverbio árabe
 Libros, caminos y días dan al hombre sabiduría

 Pablo Neruda
 En un beso, sabrás todo lo que he callado.




No hay comentarios: