domingo, 26 de noviembre de 2017

AMECE+N+I --- Avanzando

La Asociación Madrileña de Enfermería en Centros Educativos (AMECE) y desde el 12 de Septiembre de 2017, + Nacional + Internacional (+N+I), acude a cuantas instancias le permiten a poner en valor y reclamar un profesional de enfermería en todos los colegios.

En esta ocasión y durante varios días, de la mano de la Asociación Española de Personas con Epilepsia (ANPE), nos reunimos con 4 partidos políticos en el Congreso de los Diputados y en la carta, que agradecemos, queda constancia de que seguimos avanzando.

El próximo día 12 de Diciembre, también con ANPE, iremos a la Asamblea de Madrid con los mismos objetivos y planteamientos.

Hoy, al leer esta noticia, me he enfadado y entristecido, algún día seguro, esto ya no será noticia, porque habrá Enfermeras Escolares Expertas en todos los colegios.


Pendiente de una aguja


https://elpais.com/ccaa/2017/11/25/madrid/1511630990_182997.html




1 EURO



Tengo un nieto que acaba de cumplir 13 años, creo que es ya adolescente total, ya pasó la preadolescencia, que también tiene lo suyo.


Es un niño grande o un hombre pequeño, depende del día o el momento, tan pronto se acurruca en tus brazos como no quiere dar ni un beso, de ser encantador al rato tuerce el morro y no se aguanta ni él mismo. ¿Nos suena a todos, verdad?

Ayer nos fuimos de compras él y yo, detesto ir  a grandes superficies, me suelo apañar con tiendas pequeñas del pueblo donde vivo y un par de veces al año, en las rebajas y algunas cosas ya por internet con ayuda de alguna amiga o mi hija.

Íbamos a por una sudadera, el chiquillo tiene la mala costumbre de crecer y romper, sobre todo, los pantalones con el patinete, así que me dijo: a ver si te levantas temprano, trabajas en tus cosas y podemos ir a por ropa.

Pensé: ¡con todo lo que tengo que hacer y lo estructurado que tenía “con mis cosas” el fin de semana!, a las 11 ya estábamos paseando y viendo ofertas, porque sinceramente, tiene mucho arte para pedir cuando le interesa y me tiene cautivada (llevo un amplio babero desde que nació).

Compramos lo que pensábamos, incluido un libro que tengo muchas ganas de leer y terminamos en una tienda para coger unos encargos de mi hija en una perfumería.
Eran cerca de las 13h., aquello estaba empezando a llenarse de gente y las ganas de irme iban en aumento.

Como de maquillajes y sus productos no entiendo mucho, llevaba las fotos de lo que tenía que comprar.

Eran 3 productos y uno de ellos, un lápiz interlineas o algo así, me dijeron que ya no lo trabajaban, pero al pedir las otras cosas a una trabajadora agradable, rebuscó,  me dio el último que quedaba y me dijo: “dices en caja que son 1’90 euros” por ser el último.

Al ir a pagar se lo dije a la empleada de la caja,  me dijo que no, que eran 2’90, insistí, me miró  algo raro y entendiendo que están saturadas, pagué lo que me dijo.

Fui a buscar a la que me atendió, esperé a que terminara de atender a otra señora y le dije que en la caja me cobraban un euro más.

Lejos de enfadarse, si algo molesta con su compañera “porque no se enteran”, me devolvieron el euro.

Todo transcurrió con normalidad, diálogo y eso sí, más tiempo del esperable, pero aunque lo hago igual si voy sola, ayer quería que un adolescente que todavía no tiene que saber lo que cuesta ganar un euro tras de otro, de alguna manera aprendiera varias cosas, que hay que reclamar con educación lo justo, hoy era un euro, mañana pueden ser otros aspectos de la vida  y los tendrá que saber gestionar él y además de en  la escuela, las familias tenemos que enseñar también a valorar lo que tenemos, aunque sea un euro  y si es nuestro que se mantenga en nuestro monedero.

Acabamos contentos ambos, yo agotada lo confieso y él antes de llegar a casa, se cambió en el coche para que le vieran lo guapo que iba,  por cierto a mi no me emociona “su estilo” pero ya lo definirá como hemos hecho todos, ¡bendita y cansina adolescencia!, qué rápido crece y se pasa la vida, que maravilloso es poder disfrutarlo a tu lado, querido nieto.



domingo, 12 de noviembre de 2017

CLAVES DE SUPERVIVENCIA





No me siento de este mundo y sé que mi estado mental es adecuado y está incluso controlado  y que nos ocurre a muchas personas del conocido planeta tierra.

Recién cumplidos los 59 años y con casi 40 años de profesión y vida laboral en la espalda y en el alma, ya ni me corresponde una evaluación de las dos que suelo hacer al año, esta auditoría interna es ya de vida integral y de marcar objetivos qué a saber si llego a cumplir, sabiendo que hoy estoy aquí tecleando y mañana ¡quién sabe!, por tanto aunque uno mismo suele ser un juez duro e implacable, he de hacerlo, no digo que lo vaya a escribir.

Mi vida personal y familiar, se adapta a las distintas circunstancias que han ido surgiendo, difíciles, duras, desconocidas y de las que aprendiendo, el temor da lugar a la acción que  inicialmente se bloquea. Soy feliz con la familia que tengo con sus fortalezas y debilidades y seguro que las cosas mejoran  o al menos nos adaptamos a ellas con una actitud firme, activa y momentos de zozobra.

Tengo que encontrar las claves para sobrevivir sin tanta angustia y sufrimiento algunas situaciones que descubrí tarde, pero ya se sabe que nunca es tarde si la dicha es buena. 

me refiero ya al terreno profesional y laboral, al que dedicamos bastantes horas de nuestra vida y como es mi caso, cuando laboras en un medio no habitual sanitario se complica mucho la existencia y el sobrevivir.

Ser enfermera escolar desde ya camino de los 38 años y seguir apostando por esta necesidad social es para echarle ante todo mucho humor, resilencia, resistencia y muchos redaños.

Llevo muchos años contando donde me llaman y no me llaman, el perfil profesional de la enfermera escolar y sus competencias y por supuesto reclamando que en todos los colegios haya enfermería escolar, no solo para “dar un medicamento”, recuerdo a los lectores que una enfermera ha pasado por la Universidad, tras una nota de corte en selectividad de las más altas, una carrera de 4 años y está capacitada para atender en los colegios como autoridad sanitaria en los mismos y garante de salud, a todos los miembros de la comunidad educativa, principalmente los alumnos, con o sin patologías, A TODOS.

Y,  ¿por qué?

La vida en los colegios es única y peculiar y abren sus puertas  cada vez a horas más tempranas y las cierran muy tarde.

El número de alumnos puede variar de media unos 800 a 2500 en colegios ordinarios y en los de Educación Especial lógicamente menos pero con una alta necesidad de cuidados enfermeros.

En la Comunidad de Madrid, al menos hace años que tienen claro que en Educación Especial tiene que haber enfermeras, sin ratio ni nada, da igual que tengas 8 que 80, pero las hay, en otras CCAA ni siquiera hay enfermeras en estos colegios tan específicos.

Tras una serie de normativas que debieran ser de ámbito nacional y de obligado cumplimiento en todas partes, en la Comunidad de Madrid (esto no es centralismo, son datos reales y cuantificables), comienzan a haber enfermeras en coles ordinarios en un primer momento llamados “de integración” donde se empezaron a escolarizar alumnos con discapacidad motora y Trastornos Generalizados del Desarrollo (TGD).

Y hacía el 2009 tras sucesivas reclamaciones sobre todo de los padres de niños con enfermedades crónicas, siguen aumentando el número de colegios con enfermera.

En el año 2014, una normativa Orden 629/2014, de 1 de julio entre la Consejería de  Educación (que era quién nos contrataba hasta ese momento) y la Consejería de Sanidad, establece además de la contratación de las enfermeras en el ámbito educativo lo hará C. Sanidad y que C. Educación determinará en que colegios deben haber enfermeras, que ciertos alumnos con ciertas patologías: “Entre ellas, cabe destacar la atención a la salud y la fisioterapia, habitualmente asociadas a los alumnos con discapacidad motora, a los alumnos de corta edad que padecen diabetes y a los alumnos que deben ser alimentados mediante sonda gástrica”, contarán en su colegio con enfermera, dejando a otros muchos niños y niñas con otras patologías directamente fuera (alérgicos, asmáticos, enfermedades raras y otras muchas más).



AMECE+N+I, recibe a diario muchos correos electrónicos de diversa índole, madres y padres, asociaciones, directores, jefes de estudios, profesores, enfermeras que empiezan a trabajar en un colegio y nadie les dice cual es su trabajo y algún director incluso amenaza con “devolverlas”.

Y empatizamos evidentemente con la ansiedad que nos trasmiten todos los colectivos, un director al que han quitado la enfermera que llevaba 7 años porque “ya se ha ido el niño diabético a secundaria” y no sabe cómo atender a los otros muchos alumnos que lo necesitan.

Y los profesores que cada vez tienen más alumnos en las aulas y atendiendo a la ley, con algunos alumnos de atención a la diversidad, sin maestros de apoyo, sin enfermera, sin otros recursos que la normativa contempla y le obligan a dar medicación, atender inicialmente todas las urgencias y….digo yo: ¿no tienen ya bastante los docentes con dar clase y que todos sus alumnos reciban unos contenidos pedagógicos adecuados?

Y los padres de niños pequeños que debutan con una enfermedad crónica, que empiezan su lucha individual, a los que invitan amablemente a cambiar de colegio porque no les garantizan que puedan prestarle cuidados sanitarios adecuados y que lamentablemente acaban uno de los progenitores, generalmente la mujer, dejando su trabajo y de guardia permanente incluso en las cercanías o dentro del colegio en algunos casos, a la espera de si su hijo sufre una alteración de su proceso poder atenderle.

¿Esto es conciliación laboral y familiar? NO

¿Aumenta el absentismo escolar cuando no hay enfermera en el colegio? SI

¿Todos los alumnos con o sin patologías tienen los mismos derechos? NO

¿La Constitución Española en su Art. 39 refleja “Protección de la familia y la Infancia”? SI

Y podría seguir con muchas más medidas legales que se incumplen a diario, reitero que en la Comunidad de Madrid se ejecutan mucho más que en otras CCAA, pero hay que cumplirlas plenamente, conocedores de la realidad social actual, favoreciendo el llamado y olvidado estado del bienestar para los colectivos más desfavorecidos y desprotegidos, en el caso que nos ocupa, alumnos y comunidad educativa.

Y me duele leer noticias y ver fotos en las que se anuncia una supuesta noticia bomba que arregla esto tan incómodo que reclaman muchos colectivos: la atención sanitaria en la jornada escolar.

“Colaboración entre médicos del Centro de Salud y los profesores de los Colegios”

Firmado Consejería de Educación y Consejería de Sanidad de más de las CCAA de las que imagináis y que es simplemente una medida no eficaz y nada eficiente, demagogia en estado puro y no realista, es sencillamente una mentira de las gordas y que no soluciona esa necesidad de atención sanitaria. Parcheando voy, parcheando vengo y por el camino yo me entretengo.

Y me desconsuela, que muchos organismos o entes oficiales y/o privados, directamente pasen o en la sombra estén organizando y desde el desconocimiento más absoluto, campañas en pro de la Enfermería Escolar sin saber nada de su auténtica realidad y competencias profesionales e incluso los más osados (la ignorancia es atrevida y no lo dije yo, lo dijo Domingo Faustino Sarmiento hace ya algún siglo), organizando cursos de postgrado de enfermería escolar a distancia…¿Alguien da más?

Bien, podría seguir con este análisis que en un principio iba a ser mi auditoria interna y en gran parte lo es, porque aunque hay quién descansaría si AMECE+N+I tirase la toalla y no cejan en poner diversas e importantes zancadillas, por decirlo suavemente, podemos cojear por la contusión momentánea, pero seguiremos caminando, porque creemos en lo que hacemos y sabemos  el diagnóstico principal y los daños colaterales y aplicar el tratamiento adecuado, lógicamente enfermero, sin dobleces, transparencia y lealtad, que se echan mucho de menos cuando toca lidiar con algunos llamados representantes que confunden la sinceridad, humildad y conocimiento con la necedad y el despropósito.

Lo que me quede de vida tanto cronológica como profesional, seguiré apostando claramente porque en todos los colegios haya un profesional de la enfermería con formación específica para ello. 

Y no estoy sola, siempre lo digo, tengo el placer de presidir AMECE+N+I, con un grupo de mujeres valientes, comprometidas, con muchos conocimientos profesionales y entre ellas algunas ya dispuestas al relevo generacional evidente que seguirán en la brecha.

Y a otros, se supone,  les corresponde luchar por dignificar nuestras condiciones laborales, que son pésimas y que se supone están para ello, los conocimientos que nos los dejen a las que estamos en los colegios trabajando y  si es posible a las asociaciones científicas y el arte de la enfermería también, porque hay que tener arte, humor y paciencia si quieres ser enfermera escolar y no morir en el intento.


“Aprendí que el coraje no era la ausencia de miedo, sino el triunfo sobre él. El hombre valiente no es el que no siente miedo, sino el que lo conquista.”-Nelson Mandela







sábado, 4 de noviembre de 2017

PRESENTACIÓN DEL LIBRO: “EDUCACIÓN, ¿TALLA ÚNICA?”




El Colegio Profesional de la Educación tiene el gusto de invitarle:



A la presentación del libro “EDUCACIÓN, ¿TALLA ÚNICA?” escrito por Ana Roa y prologado por Irene Villa, 


Se realizará el día 8 DE NOVIEMBRE DE 2017 A LAS 18:00 HORAS en nuestra Sede de la C/ Fuencarral 101, 3ª planta. Madrid




jueves, 2 de noviembre de 2017

DOS JORNADAS INTERESANTES PARA LA ENFERMERÍA ESCOLAR





III Jornadas de Enfermería Pediátrica: “Urgencias pediátricas: abordaje desde los distintos niveles asistenciales”
21 de noviembre del 2017.
CODEM

TODA LA INFORMACIÓN AQUÍ 




VIII JORNADA DE ENFERMERIA DE SALUD MENTAL:

      “ CUIDADOS EN LA INFANCIA Y ADOLESCENCIA”

27 de noviembre del 2017

Hospital Universitario 12 de Octubre